Mariate y Alex se casaron en un lugar de ensueño: El Castell de L’Empordà, en la provincia de Girona.
Esta pareja reside en Londres, después de haber trabajado y vivido en diferentes países. Alex, el novio, es de origen británico, y Mariate, la novia, de Barcelona. Con este cocktail cultural, era imposible que no acabase saliendo algo espectacular.
Los “speach” de los asistentes fueron emotivos y acertados, y la fiesta final fue digna de “The Cavern” (y nunca mejor dicho porque la barra libre se celebró en las cuevas-bodegas del castillo), y el Rock sonó desde la costa hasta las mismas montañas.
